Las últimas semanas he podido escuchar en diversos medios de comunicación el nacimiento de una nueva clase social " el precariado", como una subclase de la trabajadora consecuencia de la reforma laboral.
En contraposición a ésta también nos encontramos otra nueva subclase dentro de la política " el neofeudalismo", su definición podría ser la siguiente:
Señores de un determinado territorio, ostentan autoridad política, económica y social sobre éste, con capacidad incluso para impartir justicia, solo debiendo rendir cuentas ante el Rey y Dios.
Digo ante ellos dos, pues como buenos Señores la justicia es diferente para ellos:
* En el feudo de Andalucía, los ERES son meros trámites administrativos erróneos, no existiendo por tanto, motivo de responsabilidad ya sea política y muchos menos judicial.
* El feudo de Valencia y Madrid, epicentro del renacimiento arquitectónico, donde el mecenazgo brota en cualquier aeropuerto, en la Ciudad de las Ciencias, sedes Olímpicas..... para satisfacción de sus ciudadanos que gracias a sus generosas aportaciones, disfrutan de las mejores instalaciones llevadas a término por magníficos empresarios, asociación "Gurtell".
* El feudo de Cataluña rebelde y dispuesto abandonar el reino, siempre se queda a cambio de nuevos privilegios feudales.
* El clero dividido en dos: el que ayuda activamente y el que intenta mantener su estatus de poder doctrinal.
* El Rey es inviolable, sin comentarios.
Por último, como nueva medida para su protección quieren imponer nuevas reglas de juego:
- Multas por manifestarse cerca de sus castillos.
- Nueva regulación al derecho de huelga de los trabajadores.
Afortunadamente, cada cuatro años tenemos el derecho a decidir quien nos representa, ahora más que nunca los "Políticos y no los señores feudales", tienen la oportunidad de abanderar la ansiada regeneración política y social:
- Transparencia en la forma y en el fondo.
- Vocación de servicio.
- Actitud y aptitud.
- Liderazgo.
A ellos/as los espero con ilusión como punto de inflexión para un nuevo camino, que nos guíe hacia la luz en el final del túnel y no una subclase que realmente siente, piensa y actúa como un verdadero señor feudal.
Una maravilla, me ha encantado. Magnífica las comparaciones, no podía ser de otra forma. Sólo añadir que una vez que los señores feudales han adquirido estos derechos, vistan del color que vistan, y aunque su escudo se diferencie unos de otros, no van a abandonarlos, cabalguen por la izquierda o por la derecha. Sólo nos queda rezar para que no vuelva el derecho de pernada, jajaja. Besos
ResponderEliminarJa,ja,ja, ja, lo único que nos faltaba el derecho de pernada, me alegra que te haya gustado
EliminarUn besote
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarEl articulo me ha gustado mucho la comparación para mi es perfecta,
ResponderEliminarson tan mangantes los de antes como los de ahora.
un abrazo
Me encanta tu blog y me están gustando cada vez más los artículos.
ResponderEliminarEstoy contigo que los políticos españoles, sobre todo a nivel local y regional, se creen que esto es su cortijo.
Pero se te ha olvidado que los señores feudales más importantes no ejercen el poder político (o no directamente), sino el económico. Así los Emilios con Botines, Pacos González, Antonios Brufaus, Juanitos Roiges, etc, etc. son los que de verdad ejercen el poder feudal.
Los señores feudales (y en este país nunca hemos salido del feudalismo, ¿verdad Cayetana?), siempre han tenido sus esbirros, que son los que bien tienen que dar porrazos a los que sacan los pies del tiesto, bien tienen que regular socialmente a base de leyes para justificar los porrazos (la pluma es más poderosa que la espada).
Los verdaderos señores feudales no sólo hacen que les tengamos miedo, sino que les amemos (como en "1984"). Que les estemos agradecidos por la "oportunidad" que nos dan al estar a su servicio, a que dejándonos la piel, o los ojos, o el sueño, o la familia -y por unas miserables migajas- estemos orgullosos de poder hacerles más ricos. Es también mi caso.
Un beso y sigue escribiendo.
Muchas gracias por tus palabras, es cierto posiblemente el poder más fuerte es el económico y alrededor de él bailan el resto.
EliminarMe ha encantado como siempre sigue escribiendo las comparaciones magnificas
ResponderEliminarGracias a ti mi niña.
ResponderEliminarEl resto de lectores han dejado poco que añadir, tan solo que me encanta la manera de expresar un poco lo.que pensamos.todos. Enhora.buena.
ResponderEliminarGracias a tu apoyo me he atrevido a escribir, pues aunque siempre me ha gustado, la timidez es mayor,
EliminarUn abrazo,